Muchos centros están introduciendo las Redes Sociales como parte de su plan de marketing educativo. En ocasiones de forma un poco kamikaze, dejando al “pobre entendido” de turno como abanderado de estas acciones, o incluso confiando en usuarios de las mismas y no en profesionales del sector.
Aquí os cuento los que a mi parecer y según mi experiencia son los fallos más comunes a la hora de que un centro educativo, aproveche estas herramientas de comunicación, y potencie su plan de marketing educativo.
1. No tener una estrategia definida en redes.
Preguntas como: ¿En qué redes estar? ¿Para qué? ¿Cómo lo vamos a conseguir? ¿Qué objetivos tenemos?¿Con qué recursos contamos? Hacen que nos apuntemos a todas, a las que se van poniendo de moda, o incluso a las que no tienen nada que ver con nosotros.
Pero lo más grave es la ausencia de un plan. Si somos capaces de realizar una programación didáctica, no mucho más complejo es plantearse unos objetivos, unas acciones y unos indicadores para cada red. (y encontrar las herramientas necesarias)
- No dotar de recursos.
Los resultados en redes sociales n
os son gratis. Nadie da duros a 4 pesetas. Para trabajar las redes necesitamos una inversión económica para contratar a alguien con experiencia, o al menos liberar a algún/os docente/s para que realice esas tareas de forma coordinada.
Materiales: será necesario poner a disposición de los encargados cierto material fotográfico, de video, (y falta saber quién y cómo va hacerlo) software y herramientas de control y publicación. Y el gran descuidado, dotar de contenido interesante y específico a las redes sociales, para lo que habrá que movilizar y concienciar a toda la organización, además de coordinarse con el área de comunicación, fotografía, periódico y dirección del centro.
- Estar porque hay que estar.
La existencia de un centro en una red social tiene que estar fundada y argumentada. Argumentos como, “mis hijos usan mucho ahora Pinterest” no son de peso para que el centro abra una cuenta. ¿Está tu publico objetivo en Pinterest?…incluso primero… ¿Cuál es tu objetivo? No. Tu público objetivo no estará muy probablemente en Pinterest, es más probable que lo encuentres en EnFemenino.com, sección embarazadas (donde probablemente ninguno habéis pensado publicitar vuestro centro #esaideaderegalo).
- No utilizar las redes para la captación de alumnos.
Son objetivos muy loables querer mejorar la comunicación con las familias, querer informar, dar a conocer tu colegio, aumentar tu visibilidad…. etc. Pero no nos engañemos,«el “pleno al 15” es convertir los esfuerzos de las redes sociales en matrículas. Y eso hay que saber hacerlo, diseñarlo e implementarlo. [Tweet «el “pleno al 15” es convertir los esfuerzos de las redes sociales en matrículas. Y eso hay que saber hacerlo, diseñarlo e implementarlo.»]
- Pensar que el impacto será inmediato y numeroso.
En mis charlas siempre me gusta hablar de las Redes Sociales como de un triatlón. Un camino largo, en el que hay que dominar diversas disciplinas y que al final, tras un gran esfuerzo, produce enorme satisfacción.
Las redes sociales no son mágicas, y no vas a pasar de ser el cole más desconocido de tu ciudad, al más deseado a no ser que seas muy valiente para “liarla muy gorda” y tengas un gran servicio detrás que lo respalde.
- Abandonar sus perfiles.
Igual que se ponen de moda y se crean, como no tienen un porqué vital de existir, se descuidan y se dejan morir poco a poco. Es peor tener un perfil inactivo que no tenerlo. “Mejor no aparecer que dar una mala imagen”.
- Ser unidireccionales.
Los colegios tienden a contar lo que hacen en su día a día, normalmente a posteriori (oportunidad perdida), sin entablar conversaciones ni engagement con sus seguidores. La forma de que alguien se sienta participe de algo, y lo sienta como propio, pasa por poder sentirse escuchado, contestado y tenido en cuenta.
[Tweet «Las redes sociales deben de utilizarse en los colegios también como herramientas de atención al cliente»] Las redes sociales deben de utilizarse en los colegios también como herramientas de atención al cliente y llegarán, con el tiempo, a ser la mayor fuente de consulta, únicamente superadas por el/la “super-conserje” (pieza clave en la atención al cliente de cualquier centro educativo y grandes descuidados de los planes de marketing educativo y de los Customer Journey)
- Publicar en cualquier momento
Existen muchas herramientas on-line, incluso gratuitas , para conocer el momento en el que tu audiencia está más receptiva a escuchar tus mensajes. No desprecies las bondades de programar bien tus horarios de publicación. ¿Cuándo publicar en cada red en general?
- No crear contenido propio interesante para nuestra audiencia.
No solo de noticias vive el hombre. Está muy bien contar todo lo que en el centro se va realizando, pero ¿realmente tu audiencia sólo tiene ese interés? Normalmente, repito «normalmente», los adultos que tienen hijos en edad escolar están preocupados por temas como la educación, hábitos y normas, las técnicas de estudio, la oferta de ocio infantil en tu ciudad… y tu público de nueva captación en temas como las mejores escuelas infantiles, nutrición infantil… esos contenidos tendrán que ser generados por el equipo de comunicación del centro o en colaboración con departamentos como el de orientación pedagógica.
- No ser útil, claro y directo.
Cada vez más la gente busca una comunicación directa, clara, sencilla, sin demasiados adornos, y si puede ser con un toque de simpatía que le alegre el día. Tengamos redes sociales para mejorar y solucionar problemas, no para ser elemento discordante y generar confusión con datos erróneos. Profesionalidad, y para eso, hacen falta profesionales formados.
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